Jorge Luis Vilchez

Mis obras son el intento de expresión de valores sociales que, a mi entender, son  imprescindibles frente a las problemáticas contemporáneas que vive el mundo occidental. En este sentido veo la necesidad de recuperar la importancia de los caudales metodológicos en el arte; es decir, la recuperación del conjunto de técnicas, modos, y destrezas que se encuentran en desuso debido a las facilidades que ostenta el arte postmoderno.

     Más allá de esta suerte de crítica, mis obras están impregnadas de ideales ecologistas puesto que los materiales utilizados son reciclados, y forjados en frio (en el caso del hierro), o alterados para obtener diversas texturas y fusiones a través de técnicas de soldadura (en el caso de la chapa). Todo este proceder manual vislumbra el largo período de realización; claro está, sin contar la fase preliminar de observación y bosquejos a partir del análisis de una poesía, noticia, canción, fotografía, o film, lo cual es el motor de la sustancia a ser creada.

     De este modo, decidí tomar una temática específica que hable de mis raíces y, sobre todo, de mí en relación y coexistencia con las mismas. Es así, que cada inspiración se ve manifestada en especies autóctonas de la Patagonia, y en donde todas y cada una de ellas se inicia desde un estado rudimentario, pasando por la metamorfosis de esqueletos, músculos, órganos, piel y pelo, sólo con líneas ferrosas que crean volumen, y a la vez vacíos, que son acabados con el viento, las hojas, el agua, el público… en fin, con el medio; y que busca –constantemente –la totalidad.

     Hoy en día, el oficio de labrar hierro tiene como finalidad reproducir rejas, estructuras, y hasta armas. Por eso, la elección de la materia prima tiene un sentido. Un sentido de necesidad, de resignificación, de introspección, de apertura y no de clausura. Y  la verdad, no veo mejor camino que el arte.

 

                                                                                           Jorge Luis Vilchez